El procedimiento se inicia con la presentación de la solicitud de arbitraje, lo que da inicio al cómputo de plazos procesales. Posteriormente, se notifica formalmente a la parte demandada.

La parte actora presenta su escrito de demanda. La parte demandada formula su contestación y, en su caso, puede interponer reconvención.

Se designa un árbitro único o un tribunal colegiado de tres árbitros, conforme al acuerdo arbitral o reglamento aplicable. Los árbitros aceptan su cargo declarando independencia e imparcialidad.

Se celebran audiencias para fomentar la conciliación, sustentar hechos, presentar pruebas y formular alegatos orales ante el tribunal arbitral.

En una audiencia preliminar, se determinan las reglas procesales y los costos del arbitraje, incluyendo los honorarios arbitrales y gastos administrativos, distribuidos según acuerdo de las partes.

El tribunal dicta un laudo final, el cual es vinculante, inapelable y ejecutable con los efectos de una sentencia judicial firme.